La delegación de Uzbekistán participó en la histórica conferencia de la ONU.

Del 22 al 24 de marzo se lleva a cabo la Conferencia del Agua de esta estructura en la sede de la ONU, en Nueva York. Todos los países miembros y agencias especializadas de la ONU, con la participación de oradores autorizados, están considerando los temas de unir al mundo en el camino hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible hasta 2030 a través de la conservación de los recursos hídricos, la importancia de los mares y océanos en el bienestar de nuestro planeta e iniciativas globales en esta área.

La comunidad internacional se reunió para una conferencia de este tipo por primera vez después de una pausa de 45 años. Después de todo, el tema es sumamente relevante: para 2050, la escasez de agua puede afectar a 5 mil millones de personas en el planeta. Uzbekistán también tiene algo que decir y ofrecer sobre este tema. En este sentido, el país ha acumulado una experiencia considerable. El Mar de Aral, que alguna vez fue el cuarto más grande del mundo, está ubicado en el territorio de Uzbekistán, y su destino actual es un asunto que no solo nos concierne a nosotros, sino a toda la comunidad internacional.

Además, en los últimos años, el Presidente de la República de Uzbekistán Shavkat Mirziyoyev, cada vez que participaba en reuniones de alto nivel de las Naciones Unidas, ciertamente planteó el problema del Mar de Aral y presentó importantes iniciativas.

Entre los 198 países miembros de la Organización, la delegación de Uzbekistán también participó en la conferencia.

El 23 de marzo, en la sesión plenaria de alto nivel de la conferencia, miembro de la delegación de Uzbekistán, Saida Mirziyoyeva, se dirigió a la conferencia de la ONU y pronunció un discurso sobre las consecuencias de la tragedia de Aral, el trabajo a gran escala realizado por Uzbekistán para mitigarlos, así como el liderazgo del país en aunar esfuerzos internacionales en esta área.

Al señalar que Muynak fue una vez una próspera ciudad portuaria con grandes capacidades de producción, y después de que se perturbó el equilibrio, apareció un cementerio de barcos en las costas muertas, recitó un extracto de la elegía del famoso poeta karakalpako Ibrahim Yusupov, describiendo la tragedia de un mar convirtiéndose en un desierto en un abrir y cerrar de ojos.

“La crisis del Mar de Aral es un recordatorio devastador de las consecuencias del descuido ambiental humano. Sin embargo, gracias a los esfuerzos de las personas solidarias, ahora se está convirtiendo en un símbolo de esperanza y renovación”, dijo Saida Mirziyoyeva.

Se enfatizó que las iniciativas presentadas por el Presidente Shavkat Mirziyoyev recibieron un amplio apoyo a nivel internacional, y en 2021 se adoptó una Resolución de la ONU declarando la región del Mar de Aral una zona de innovaciones y tecnologías ambientales, y un poco antes, en 2018, se estableció el Fondo Fiduciario de Socios Múltiples de la ONU para la Seguridad Humana para la región del Mar de Aral.

Al hablar de las medidas implementadas por el Estado, el expositor señaló que se destinaron más de 14 millones de dólares para la ejecución de proyectos destinados a reactivar la región.

Se destacó la resiliencia, la diligencia y la creatividad del pueblo de Karakalpakstán, que está experimentando directamente las consecuencias de la tragedia. Se llamó la atención sobre el hecho de que en las difíciles condiciones de la región, las mujeres necesitan atención y apoyo especiales, es necesario ampliar las oportunidades para ellas.

Después de su discurso, Saida Mirziyoyeva hizo un llamado a la comunidad internacional para que continúe apoyando los esfuerzos de Uzbekistán para mitigar las consecuencias de la tragedia del Mar de Aral, que está indisolublemente ligada a los problemas mundiales del agua.

El 22 de marzo, en el marco de la Conferencia del Agua de la ONU, tuvo lugar la presentación del proyecto Aral Culture Summit, iniciado por la Fundación para el Desarrollo del Arte y la Cultura dependiente del Gabinete de Ministros de Uzbekistán. Esta es una nueva institución que reunirá a la comunidad local e internacional, destacados científicos, arquitectos, artistas y diseñadores.

Como parte de la Cumbre Cultural de Aral, se crearán programas educativos y de intercambio, becas y pasantías que motivarán a las generaciones más jóvenes a desarrollar habilidades que contribuyan a mejorar la situación en la región.

Como parte de la Cumbre, se creará un laboratorio agrícola de biodiseño. Se estudiarán y desarrollarán diversas tecnologías para abastecer de agua a la región, crear nuevos tipos de cultivos y reducir la salinidad del suelo en la región.

La Cumbre reunirá a personas creativas con agricultores locales para construir relaciones sostenibles en biodiseño, cultivar nuevas plantas y, por lo tanto, desarrollar un plan estratégico para los próximos 10 años. Esto preparará el escenario para grandes cambios en la comunidad local.

La esencia y el significado de la próxima cumbre se discutieron en detalle durante los diálogos interactivos que se llevaron a cabo al margen de la conferencia "Agua para la cooperación: cooperación transfronteriza e internacional en materia de agua, cooperación intersectorial, incluida la cooperación científica, y agua en la Agenda 2030" y un panel de discusión “Del arte a la acción: transformando el desierto en bosque para el renacimiento de la región del mar de Aral” organizado por la Fundación con la participación de expertos internacionales.

Se realizó una reunión con nuestros compatriotas en los Estados Unidos. El alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, también asistió al evento.

Saida Mirziyoyeva felicitó a la audiencia por la festividad de Navruz y habló sobre las grandiosas reformas que se están llevando a cabo en Uzbekistán.

Durante el cálido conversatorio, se señaló que los compatriotas no rompen los lazos con su Patria histórica, están muy interesados en los cambios que se están dando en el país, y a través de la implementación de diversos proyectos buscan fortalecer los lazos culturales, políticos y económicos entre Estados Unidos y Uzbekistán.

UzA