¡Estimados Jefes de delegaciones!
¡Estimados Jefes de Organizaciones Internacionales!
¡Damas y caballeros!
Les doy la bienvenida a todos los participantes de la Conferencia Internacional cumbre sobre la implementación de la Estrategia Global de las Naciones Unidas contra el Terrorismo en Asia Central, organizada conjuntamente con la Oficina de las Naciones Unidas contra el Terrorismo y la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa.
Quisiera expresar mi especial agradecimiento al Secretario General de las Naciones Unidas, Sr. António Guterres por apoyar nuestra iniciativa de realizar este Foro.
También me gustaría agradecer a la Secretaria General de la OSCE, la Sra. Helga Schmid, al Secretario General Adjunto de las Naciones Unidas, el Sr. Vladimir Voronkov, a la Directora del Centro Regional de la ONU para la Diplomacia Preventiva para Asia Central, la Sra. Natalia Gherman y los Ministros de Relaciones Exteriores de los países de Asia Central por la organización conjunta de este importante evento.
Su participación en esta Conferencia es una prueba clara de su compromiso de combatir conjuntamente el terrorismo y otros desafíos y amenazas en nombre de la seguridad y la estabilidad mundiales.
¡Estimados participantes de la Conferencia!
Hoy somos testigos de una intensificación de las contradicciones en las relaciones internacionales, una disminución general del nivel de confianza y cooperación entre los países. Junto a ello, persisten focos de tensión y conflictos armados en diversas regiones del mundo.
La pandemia, que ha afectado a todas las esferas de la vida pública y la actividad económica, está teniendo el impacto más negativo en el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU. Las crisis en la economía y la vida social están exacerbando la desigualdad en el mundo, aumentando significativamente los riesgos de exacerbación de conflictos.
En circunstancias tan difíciles, es importante que la comunidad internacional consolide sus esfuerzos para resistir a las crecientes amenazas a la seguridad mundial y regional.
Hace quince años, todos los países del mundo aprobaron por unanimidad la Estrategia Global de la ONU contra el Terrorismo. Se convirtió en la primera base legal integral, colectiva y universalmente reconocida para combinar los esfuerzos nacionales e internacionales en la lucha contra el terrorismo.
En 2011, Asia Central dio el primer ejemplo exitoso de regionalización de este documento político, cuando los cinco países adoptaron el Plan de Acción Conjunto para su cumplimiento.
La implementación del Plan ha fortalecido un consenso regional sobre principios y enfoques compartidos en la lucha contra el terrorismo y ha establecido mecanismos efectivos para la cooperación tanto a nivel bilateral como multilateral.
Los países de la región han formado sistemas nacionales para resistir al terrorismo. Se han desarrollado estrategias de acción de país que cumplen plenamente con las recomendaciones de la ONU.
Esto ha permitido a nuestras naciones llevar a cabo un diálogo más estructurado y productivo, compartir experiencias e información importante, desarrollar la capacidad antiterrorista y lograr juntos lo que no se puede lograr solo.
Y en el resultado, en la actualidad muchas clasificaciones internacionales autorizadas consideran a Asia Central como una de las regiones más seguras del mundo.
En los últimos años ha habido cambios positivos fundamentales aquí. El desarrollo gradual de relaciones de buena vecindad entre los países de la región basadas en los principios de amistad, beneficio mutuo y confianza.
Las reuniones consultivas regulares de los jefes de los Estados de Asia Central contribuyen a la realización del enorme potencial de nuestros países para garantizar la seguridad regional y el desarrollo sostenible.
Considerando a Afganistán como una parte integral de Asia Central, los Estados de la región dan una ayuda humanitaria al pueblo afgano, asistiendo plenamente en la reformación de la economía pacífica e integrando al país en los vínculos comerciales y económicos regionales.
¡Distinguidos damas y caballeros!
Uzbekistán ha firmado 14 documentos legales internacionales universales principales y participa activamente en los esfuerzos globales para contrarrestar el terrorismo internacional.
La política estatal en esta materia se basa en un enfoque integral, inclusivo y coherente. Como es bien sabido, este enfoque combina el uso de medidas preventivas y profilácticas junto con la aplicación de la ley, y no solo los organismos estatales, sino también las instituciones de la sociedad civil participan activamente en la implementación de los elementos clave de la Estrategia Global de la ONU contra el Terrorismo.
Las prioridades clave en este sentido incluyen el establecimiento de una atmósfera de comprensión mutua y la promoción del diálogo y la tolerancia en la sociedad, la prevención de conflictos, la educación espiritual y moral, el avance de la educación, incluida la formación profesional, la creación de empleo y la protección social de las poblaciones vulnerables. Se presta especial atención al diálogo intercultural e interreligioso y al empoderamiento de las mujeres y los jóvenes.
La base fundamental para combatir el terrorismo en Uzbekistán es garantizar los derechos humanos y las libertades y el Estado de derecho. Estamos convencidos de que la lucha contra el terrorismo y la protección de los derechos humanos no son objetivos contrapuestos, sino complementarios y que se refuerzan mutuamente.
Estoy seguro de que hoy podrá analizar exhaustivamente el curso de nuestra cooperación en el marco del Plan de Acción Conjunto y determinar las áreas nuevas e innovadoras.
En este contexto, sugerimos considerar una serie de propuestas para aumentar la eficacia de nuestra lucha conjunta contra el terrorismo y el extremismo.
Primera. Es obvio que una mayor implementación exitosa de la estrategia antiterrorista en la región requiere el fortalecimiento de los mecanismos para el monitoreo constante y la evaluación crítica de la implementación del Plan de Acción Conjunto y la coordinación de la cooperación entre los países de Asia Central.
En este sentido, creemos que hace mucho tiempo que se debe establecer una Oficina de las Naciones Unidas contra el Terrorismo en nuestra región.
Para lograr la máxima sinergia de la cooperación coordinada en la lucha contra el terrorismo en Asia Central, proponemos asegurar su estrecha cooperación con las principales organizaciones internacionales y regionales comprometidas en resolver los problemas de seguridad.
Segunda. Hoy en día, casi todos los países del mundo se enfrentan al terrorismo en el ciberespacio. Internet se está convirtiendo en una herramienta para difundir ideologías radicales, reclutar personas, proporcionar apoyo financiero y planificar y llevar a cabo actividades terroristas.
Bajo estas circunstancias, es crucial desarrollar la capacidad de nuestros Estados para contrarrestar de manera efectiva el uso de las tecnologías digitales con fines terroristas.
Hacemos un llamado a la Oficina de las Naciones Unidas contra el Terrorismo para que intensifique sus esfuerzos para implementar el Programa de Seguridad Cibernética y Nuevas Tecnologías en Asia Central, adoptado en 2020.
En el marco de este programa, consideramos importante crear una red electrónica unificada sobre ciberterrorismo en Asia Central para promover el desarrollo del intercambio de experiencias y datos, investigaciones y mejores prácticas en esta área.
Además, la naturaleza transfronteriza de las amenazas a la seguridad en el ciberespacio requiere la creación de mecanismos legales internacionales unificados para contrarrestar de manera efectiva diversas formas de extremismo y terrorismo en la esfera de la información. Esperamos la asistencia de la ONU para establecer y coordinar un diálogo sobre este tema.
Tercera. En los últimos años, los países de Asia Central han repatriado a más de 1.500 de sus ciudadanos de las zonas de conflicto de guerra y han desarrollado enfoques únicos para su rehabilitación y reintegración.
En este sentido, proponemos establecer, bajo la égida de la Oficina de las Naciones Unidas contra el Terrorismo, un consejo regional de expertos compuesto por destacados expertos de Asia Central. Su tarea principal sería mejorar los programas de rehabilitación y reinserción de ciudadanos radicalizados y desarrollar propuestas para combatir la propaganda terrorista en nuestros países.
Cuarta. La condición esencial para contrarrestar con éxito el terrorismo y el extremismo es una política de juventud eficaz. La Estrategia de las Naciones Unidas para la Juventud enfatiza que los jóvenes son un recurso valioso y extremadamente importante, una inversión que se verá recompensada muchas veces.
El futuro de nuestros países depende de quienes criamos, qué tipo de educación y crianza damos a los jóvenes, y qué condiciones y “ascensores sociales” creamos para ellos.
Para una discusión integral de todos estos temas, proponemos convocar en 2023 en Samarkanda el Consejo Permanente de la Juventud de Asia Central y Meridional que hemos propuesto anteriormente. Como el resultado de la reunión, es importante desarrollar un Plan de Acción para ampliar la cooperación multilateral entre la juventud de nuestros países, intercambiar experiencias en la creación de condiciones favorables para la autorrealización de la generación joven y la formación de una inmunidad estable a la ideas de extremismo y terrorismo.
Quinta. En la Estrategia Global de las Naciones Unidas contra el Terrorismo, como saben, el tema clave es la promoción de las ideas y principios de la tolerancia, el respeto mutuo y el diálogo interreligioso e intercultural con la participación de todos los estratos de la sociedad.
En 2018, según la iniciativa de Uzbekistán, la Asamblea General de la ONU adoptó la resolución especial “Ilustración y tolerancia religiosa”, que enfatiza la importancia de eliminar el analfabetismo y la ignorancia y promover la tolerancia, el respeto mutuo y la comprensión en nombre del fortalecimiento de la seguridad y la paz en el planeta.
Proponemos que el próximo año se celebre una Conferencia cumbre sobre “Ilustración y Tolerancia Religiosa” bajo la égida de las Naciones Unidas para identificar áreas prometedoras para la cooperación práctica en la promoción de las ideas contenidas en la Resolución Especial de la ONU.
¡Damas y caballeros!
Nuestros esfuerzos para prevenir y resistir al terrorismo solo serán productivos si se coordinan de manera eficaz a nivel regional y mundial.
Por lo tanto, las deliberaciones de esta Conferencia y la adopción de la Declaración de Tashkent y el Plan de Acción Conjunto actualizado para implementar la Estrategia Global de las Naciones Unidas contra el Terrorismo en Asia Central, son muy importantes.
Deseo a todos los participantes de la Conferencia Internacional cumbre las deliberaciones productivas, debates reflexivos y estimulantes, y el desarrollo de propuestas e iniciativas nuevas e innovadoras destinadas a consolidar la seguridad y la estabilidad internacionales.
Shavkat Mirziyoyev,
El Presidente de Uzbekistán